Una reforma en tiempo récord

Hoy os hablamos del proyecto que llevamos a cabo en Diseño Interior Bruto el verano del año pasado, la reforma integral de una vivienda de 90m² junto a la calle Príncipe de Vergara.

El piso en cuestión, como podéis observar, además de ser muy antiguo, llevaba varios años deshabitado y se encontraba en un estado lamentable. Su configuración inicial estaba formada por tres dormitorios, salón, cocina, baño, aseo y dos largos pasillos que fragmentaban la vivienda.
Sus nuevos propietarios, una pareja joven con tres hijos, necesitaba una renovación completa de las instalaciones y un cambio drástico en la distribución, para que la vivienda cumpliese con todas sus necesidades. Nos pidieron optimizar el espacio al máximo y distribuirlo en cuatro dormitorios, dos cuartos de baño, cocina y salón; además cada dormitorio debía tener su propia entrada de luz natural, un armario y el salón debía ser lo más amplio posible.

El primer paso para Diseño Interior Bruto, fue pensar en la redistribución del espacio.

Por un lado, minimizar los espacios muertos para sacar partido a cada centímetro. Para ello, se optó por la demolición de toda la antigua tabiquería, incluyendo un patinillo interior que apenas aportaba luz natural y restaba un espacio considerable. Dicho espacio se repartió entre uno de los baños y la nueva cocina. Aunque nos condicionaban las ventanas a la hora de crear las estancias, logramos dar con la configuración del nuevo espacio, consiguiendo una distribución funcional y renovada que cumplía con las expectativas de nuestros clientes. ¡Se sacaron metros de donde parecía imposible hacerlo!

Después del planteamiento de la nueva tabiquería, ya en obra, se comenzó con las instalaciones. Se cambiaron todas y se añadió aire acondicionado por conductos en todas las estancias.

Otro de los recursos que utilizamos para sacar ese rendimiento a los metros de la vivienda, fue poner puertas correderas en los baños, lacadas en blanco, como en el resto de la carpintería de la casa. Además, en la cocina, la elección de un cerramiento de cristal de casi 3 metros de ancho, con dos hojas deslizantes, fue decisiva por varios motivos: ganar en amplitud visual, integrar la misma al salón y dotarla de la luz natural que carecía. Con esto, logramos que dicha estancia se convirtiera en la pieza clave de la vivienda, por su diseño y funcionalidad.

La iluminación también fue algo decisivo en esta reforma. Sacamos el máximo partido a las entradas de luz natural y para la iluminación artificial, se optó tanto por puntos de luz en el techo para colgar lámparas, como por focos LED y Downlight. Para distribuir los puntos de luz, tuvimos muy presente el uso que se daría a cada zona de la casa, para que la iluminación fuera la idónea en todo momento.

En definitiva, para Diseño Interior Bruto supuso un reto realizar esta reforma en tan sólo 8 semanas, pero el resultado no pudo ser más satisfactorio. Sus dueños por fin consiguieron la casa de sus sueños… moderna, funcional, con detalles y acabados de calidad y 100% acorde a su estilo de vida.

Como podéis ver es increíble el antes y después, parece otra casa. Esperamos os haya gustado 🙂
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Estamos muy ilusionadas, con este post estamos participando en la fiesta de enlaces #DiarioDeco12, una fiesta mensual donde se propone un tema diferente a tratar cada mes… pero siempre dentro del marco del interiorismo y la decoración.

Imágenes y texto de Diseño Interior Bruto.

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