Estamos acostumbrados a vivir en interiores en los que prima la línea recta, de hecho es bastante atípico encontrar viviendas o espacios en los que arquitectónicamente predominen las curvas. En los espacios más cotidianos, sólo nos atrevemos a introducirlas de forma tímida en mobiliario o elementos decorativos.
No es que nunca se haya utilizado la curva en arquitectura, diseño de interiores o decoración, para nada, es más, siempre ha existido. Lo que ocurre es que las líneas puras del racionalismo han gozado de mayor presencia, probablemente porque los espacios se organizan mejor así. Ahora estamos viviendo una nueva eclosión de la línea curva en espacios interiores, sencillamente la estamos viendo con mayor audacia y protagonismo, integrada de forma más natural pero también más potente y visible.
La podemos ver a través de formas arquitectónicas y estructurales (arcos, bóvedas, columnas, hornacinas, puertas, ventanas…), puede estar enfatizada gracias al color o contraste de texturas, o representada en el mobiliario y objetos de decoración (como los espejos redondos de los que os hablábamos aquí).
Nadie duda de la sensualidad de las formas curvas, de su capacidad de transmitir movimiento y de su organicidad. Gracias a ellas y a interioristas y decoradores que empiezan a utilizarla sin miedo, salimos por fin, de la monotonía de las rectas.
Os mostramos algunos proyectos como ejemplo, para que veáis las maravillas que se están haciendo con curvas:
Fotografías de Roberto Ruíz.
Imágenes de Hayon Studio.
Imágenes de Penda.
Imágenes de Chzon.
- Varios proyectos. Daria Zinovatnaya.
Imágenes de Daria Zinovatnaya.
Imágenes de Pal Design.
Imágenes de Biasol.
- Marie-Joséphine. Batiik Studio.
Imágenes des Batiik Studio.
Imágenes de Crosby Studios.
¿Te atreves a tomar curvas? Cuéntanos si te han gustado estos proyectos y si te atreverías a tener algo similar en tu casa o espacio de trabajo.
Hasta la semana que viene.